logo
Quiero donar

Explorando

Recorriendo Perú

portada

PASTIZALES

PASTIZALES

ESTEROS

ESTEROS

MONTAÑAS

MONTAÑAS
background
image

Perú es un país muy muy diverso, cultural y ecosistemicamente. Mar, desiertos áridos, bosques de altura y selva del Amazonas.

En Perú el primer avistaje carnívoro fue en el sendero a la cascada de Gocta. Una caída de agua enorme que parece teletransportarnos al pasado. Con helechos arborescentes gigantes atravesados por nubes húmedas. En el barranco que limitaba el sendero, en un suelo arcilloso se encontraba la Utricularia subulata. Un único y aislado ejemplar que llenó de encanto el día. (ese día no requería mas encanto, el paisaje en sí era una locura).

Pero si algo fue suficiente para derretir el cerebro de felicidad, fue conocer la selva Amazónica peruana. Delfines rosados, perezosos, ranas de dimensiones alucinantes eran parte del conjunto faunístico que salpicaban las selvas bajas con cursos de agua muy turbios.

No era la época lluviosa, pero el agua estaba tan crecida que andar en canoa implicaba flotar sobre árboles.

Y en esas aguas, con delfines rosados (y también grises), pirañas y otros seres subacuáticos, estaban ellas. Plantas carnívoras acuáticas.

Encontramos Utricularia gibba y Utricularia foliosa.

Fue muy interesante encontrar distintas “formas” de Utricularia gibba. En este viaje comprendimos que esta especie cambia su crecimiento según la calidad del agua. Hallándose ejemplares más robustos en aguas turbias de taninos negros que en las otras.

Incluso hicimos el experimento, separamos esta planta “robusta” de Utricularia gibba y al cultivarla en otra calidad de agua la misma tomaba su apariencia más común.

Este viaje implicó también compartir con los guías locales el conocimiento sobre sus carnívoras nativas. En el mismo viaje notamos cómo ellos ya demostraban orgullosos cuáles eran las plantas carnívoras del Amazonas peruano.